Los viernes en el hospital suele ser el día más ligero porque es cuando dan las altas, normalmente.
En los ratos libres, a los estudiantes de enfermería normales se les ocurre adelantar trabajo como purgar pitufillos o cargar la medicación de la noche... Luego estamos nosotros que somos cafres y practicamos las extracciones de sangre los unos a los otros (que conste que lo otro también lo hacemos).
Yo pinché a Jenny y, por primera vez, pincho bien a alguien!!!! Suuuuuuh!!!! Aunque bueno. luego le hinchó un poquito la vena porque debí de rompérsela, pero tampoco se puede ser perfecta, no?
A mí me pinchó Miguel (nuestro compañero de neumo) y no me encontró las venas porque las tengo muy profundas...
Para este finde, me traje unas palomitas a casa y también pinché a mi madre y al novio de mi prima (de mí no se salva nadie jeje) y les encontré las venas bien.
Supongo que queréis saber cómo se hace.... Pues bien, en primer lugar, necesitáis tener en vuestra batea el siguiente material: un bote de alcohol o clorhexidina (a gusto del profesional), un compresor, palomitas (por si falláis, es mejor coger varias), gasas estériles y los tubos necesarios (aunque si sólo vais a practicar el pinchazo, los tubos no os hacen falta).
Lo primero que hay que hacer es coger el compresor y apretar el brazo del paciente un poco más arriba de donde se va a pinchar. Después, empezamos a buscar las venas palpando (no vale verlas, hay que palparla y seguir el recorrido para que la aguja lo siga posteriormente). Si no la damos encontrado, podemos limpiar la zona con alcohol para poder identificarlas mejor.
Cuando ya la tenemos, introducimos la aguja (bisel siempre hacia arriba) y si estamos en vena, nos empezará a refluir la sangre. En caso de tener tubos, los unimos y extraemos la sangre; sino, colocamos ya una gasa por encima de la aguja, desatamos el compresor y, finalmente, retiramos la aguja mientras presionamos con la gasa.
Como veis. el arte de encontrar venas no es lo más fácil y seguir su curso ya ni os cuento... No os preocupéis si no le pilláis el truqui rápido porque es dífícil y depende mucho del paciente que os toque. Así que, 0 dramas y practicar y practicar!!
En los ratos libres, a los estudiantes de enfermería normales se les ocurre adelantar trabajo como purgar pitufillos o cargar la medicación de la noche... Luego estamos nosotros que somos cafres y practicamos las extracciones de sangre los unos a los otros (que conste que lo otro también lo hacemos).
Yo pinché a Jenny y, por primera vez, pincho bien a alguien!!!! Suuuuuuh!!!! Aunque bueno. luego le hinchó un poquito la vena porque debí de rompérsela, pero tampoco se puede ser perfecta, no?
A mí me pinchó Miguel (nuestro compañero de neumo) y no me encontró las venas porque las tengo muy profundas...
Para este finde, me traje unas palomitas a casa y también pinché a mi madre y al novio de mi prima (de mí no se salva nadie jeje) y les encontré las venas bien.
Supongo que queréis saber cómo se hace.... Pues bien, en primer lugar, necesitáis tener en vuestra batea el siguiente material: un bote de alcohol o clorhexidina (a gusto del profesional), un compresor, palomitas (por si falláis, es mejor coger varias), gasas estériles y los tubos necesarios (aunque si sólo vais a practicar el pinchazo, los tubos no os hacen falta).

Cuando ya la tenemos, introducimos la aguja (bisel siempre hacia arriba) y si estamos en vena, nos empezará a refluir la sangre. En caso de tener tubos, los unimos y extraemos la sangre; sino, colocamos ya una gasa por encima de la aguja, desatamos el compresor y, finalmente, retiramos la aguja mientras presionamos con la gasa.
Como veis. el arte de encontrar venas no es lo más fácil y seguir su curso ya ni os cuento... No os preocupéis si no le pilláis el truqui rápido porque es dífícil y depende mucho del paciente que os toque. Así que, 0 dramas y practicar y practicar!!
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